Andrés Felipe Arias no estuvo en la Convención Conservadora, pero su fantasma sí. Recorrió los pasillos del centro de convenciones, estuvo entre la multitud y asustó a los notables azules sentados en primera fila. En los discursos lo evocaron varias veces como el hombre que no cumplió su palabra. Y, al final, el partido se unió en torno a Noemí y en contra de él.
La convención tuvo un comienzo lento, como si se tratara de una larga etapa ciclística. En la mesa principal hablaban entre otros el rector de la Universidad del Rosario, Hans Peter Knudsen; Carlos Martínez, director de la Academia del Pensamiento Conservador, y la fórmula vicepresidencial de Noemí, Luis Ernesto Mejía. Ninguno hablaba de política, sino de programas y doctrinas. O mejor, sí hablaban de política, pero no de la que quería oír la gente.
Abajo sólo se mencionaban dos nombres: Andrés Felipe Arias y Juan Manuel Santos. Mucho más el primero que el segundo. Los delegados del partido y los asistentes se reunían en corrillo para criticar. Pero no lo hacían de cualquier manera: parecían técnicos de un equipo analizando el rival de turno. "Arias se fue, pero su gente tiene el corazón azul"; "los que se fueron no ponen votos"; "¿quién es, a final de cuentas, Arias?"; "no sigamos hablando de la ‘disciplina para perros’, no le demos esa comidilla a la prensa"…. Era fácil coger las conversaciones al vuelo, mientras caminaba por los corredores.
Cuando yo interrumpía alguna de las conversaciones para preguntarles por alguno de estos temas, todos asumían la actitud ceremoniosa de alguien que va a dar un discurso. Entonces las declaraciones se volvían frases de cajón: “el partido está más unido que nunca”, me dijo uno. Hice de cuenta que anotaba esa frase. “¿Qué hay problemas? ¡Claro que hay problemas!, pero estamos acá trabajando”, me dijo otro. Ya no hablaban cómo técnicos sino como futbolistas.
En la sala de prensa repartieron un comunicado de Arias a la opinión pública. “El partido evidencia fractura en sus bases. Cada día vemos más conservadores apoyando otras propuestas políticas. Los votos de las casas conservadores tradicionales no son ‘tres voticos’”, decía un aparte. “Por ello invito a que se evalúe la posibilidad de construir alianzas con otros proyectos políticos afines”, remataba. Tal vez si hubiera estado en la convención, Arias no habría logrado el protagonismo que tuvo.
Después del receso, hacia las cinco de la tarde, comenzó la recta final de la convención. Dijeron entonces que había cuatro mil personas presentes. La mayoría de ellas en el enorme salón, que fue acondicionado a imagen y semejanza de una convención gringa; otra parte en dos salones adicionales que tenían transmisión por televisión, y una parte más, dispersa en los corredores.
El primer discurso estuvo a cargo de Marta Lucía Ramírez. Su tono fue plano, casi corporativo. Se cuidó de no lanzar demasiadas puyas y, como precandidata derrotada en la consulta, ofreció todo su respaldo a Noemí. “Entramos en acuartelamiento de primer grado”, dijo.
La siguió José Galat que fue, hasta ese momento, el orador que más entusiasmo despertó. Dijo que era un hombre de palabra – en clara alusión a ‘Uribito’ – y recordó la gloriosa historia del Partido Conservador, que por supuesto para él se origina en los valores católicos.
El aplausómetro marcaba más cuando se pronunciaba la palabra 'Pastrana' que cuando se pronunciaba 'Uribe'. No podría decir que se trataba de un auditorio anti-urbista, ni mucho menos, pero sí parecía más un grupo de leales a la figura tradicional del partido.
Siguió Álvaro Leyva, que trajo su verbo de plaza pública directo a la tarima del centro. Alzó la mano, gritó, se deshizo en elogios con Noemí y le habló directo al ex ministro de Agricultura. “Señor Andrés Felipe Arias”, le decía como si lo estuviera viendo en algún rincón, “no estamos acá por disciplina para perros, sino por convicción”.
Leyva le cedió la palabra el ex presidente Betancur, que salió de su retiro – como él mismo lo dijo – para apoyar a su ex Ministra de Comunicaciones. Betancur no se quedó en las peleas coyunturales sino que le dedicó su prosa a temas históricos, políticos y filosóficos. ¿Qué es Nación?, se preguntó y ofreció decenas de respuestas.
El último telonero, la estrella antes de la estrella, fue el ex presidente Andrés Pastrana. También elogió a Noemí, también habló de la gloria del partido y también le lanzó dardos a Arias. Pero sobre todo centró sus fuerzas en Juan Manuel Santos, su ex ministro de Hacienda. Leyó casi toda la columna que Santos escribió en 2003, cuando defendió la obra de Gobierno de Pastrana. "Mis dos ex ministros", repetía en alusión a Santos y Angelino Garzón. Después puso la mira en los 'falsos positivos'. No es posible que los triunfos militares sean responsabilidad del Ministro mientras las derrotas y los problemas son responsabilidad de los subalternos, dijo en palabras más, palabras menos.
Y llegó el final de la noche con la aparición de Noemí. Se elevó desde el piso, como una estrella de rock, y recibió los aplausos y las vivas de los asistentes. La gente estaba entusiasmada, pero también cansada después de una larga jornada. Sanín no le dedicó más que una mención a Arias. Le dio las gracias y lo invitó a trabajar. Y siguió de largo. Le dio las gracias a Uribe - "quiero rendirle un homenaje", dijo - y habló de su programa de gobierno.
La convención terminó con un mensaje de unidad, con plenos poderes para Noemí y con una energía renovada para la campaña, que viene lidiando con las deserciones y las manchas verdes en el panorama. Al final me preguntaba a quién le hablaron todos los que hablaron: ¿al grueso de los colombianos, que no deben entender o no quieren saber nada más de la pelea con 'Uribito, de las "fuerzas vivas" del partido o de la gloria conservadora?, ¿a los militantes del partido?, ¿a 'Uribito'?
La campaña de Sanín no quiere pensar más en eso. No le da importancia o trata de no hacerlo. Ahora sí, dicen. Después de la convención las cosas serán a otro precio. Tal vez ya no se hable más de Arias, pero a mí me pareció verlo ayer paseándose por el centro de convenciones. Y aunque no creo en fantasmas, que existen, existen.
Bueno, Noemí se unirá a Santos, de eso no cabe duda. Aunque ella lo critique y le diga de todo, ya sabemos que va para donde le conviene, no para donde quiere; aún cuando en muchos de sus discursos quiera sonar como Mockus (y dele con "construir sobre lo construído"). Eso es otra muestra de la falta de personalidad política que tiene
Noemí va a primera vuelta solita, pero más temprano que tarde los conservadores, incluidos ella estarán apoyando a Juan Manuel Santos.
lo unico es que si la candidata noemy no se une a juan manuel santos ahora despues se va arrepentir de esto y luego va hacer demasiado tarde
me parece una estupides que noemy siga y siga ensistiendo en algo tan absurdo como lo es su candidatura presidencial mejor que se una a juan manuel santos que es la mejor opcion
a estas horas y noemy no se da cuenta que si sisue como va ira directo al fracaso lomejor que ella puede hacer es unirse a juan manuel santos que va hacer el proximo presidente de los colombianos
los conservadores se estan viniendo con santos por que ellos ya saben que el es lo mejor para el pais y para ellos
Por favor!!! Todos los llamados, godarrios, liberales, la u, cambio radical, mira, pin y demas etc.etc.etc, SON LOS MISMOS CON LAS MISMAS, o como decian mis abuelitos, LOS MISMOS PERROS CON DIFERENTES GUASCAS. O no lo ven?? Aqui no hay nada nuevo y terminaran como siempre sentados en la misma mesa, comiendo de lo mismo y repartiendose el POTRERO (colombia) como siempre y muchos del REBAÑO (colombianos), regalando el voto por 2mil pesitos, por una pipa de gas, por un almuerzo completo, por un trago, por un mercadito de 15mil y hasta por mas promesas que jamas cumpliran. Por eso la OLA VEEERDEEE crece cada dia, porque los que si pensamos y queremos una colombia mejor, sin guerra ni balas, vamos a votar por MOCKUS y sera un nuevo presidente, sin corruptos en su gobierno.
NO HABRA SEGUNDA VUELTA, LES DAREMOS LA LECCION EN UNA SOLA ELECCION. VAMOS A LOGRAR MAS DE 7MILLONES Y TODOS los de siempre, A LLORAR.
No, no habrá segunda vuelta porque el 30 de mayo Juan Manuel Santos gana la presidencia.
No habrá segunda vuelta pero porque el presidente será el más honesto y la gente que tiene opinión está buscando otros que hacen lo mismo para que voten con responsabilidad y otros están hablando con los abstencionistas para que también se responsabilicen por su país. De esta forma los partidos hechos para delinquir tendrán un contrapeso más fuerte que la corrupción
Si gana, ya sabemos quién va a ser el peor presidente en la historia del país.
arias por fin se dio cuenta que el lo que estaba buscando lo encontro en el partido de la u con la seguridad democratica
Yo no entiendo porque los conservadores no se decidieron por la alianza con Santos. La última encuenta muestra que Santos se consolida y Noemí se pierde en el tercer lugar.
Noemí es muy pretenciosa al pensar que va a ganar y muy orgullosa para ceder sus aspiraciones por el bien colectivo de la seguridad democrática. Ojalá que los conservadores se reunan en torno a Santos en una segunda vuelta y así logremos derrotar a los que no quieren que el país siga en el camino del progreso.
Es cierto, se ha progresado, y las cifras aumentan: más desempleo, más muertos (gracioso que otro uribista lo ataque con los falsos positivos), más desplazados, más de todo. Creo que para algunos, la palabra progreso tiene otro significado
Ala, que belleza No-es-mí Presidenta. Se ve como toda una reina de belleza en esas fotos, ¡Carajo!
¡Alá...!
¿Por qué Andrés Felipe Arias recibe tanta atención de los medios y se le da tanta importancia?
¿Habrá algún remedio para nuestro país no siga siendo influenciado por individuos como este, advenedizo de la política, avivato, marrullero y buscapleitos, cuyo discurso no va más allá de una colección de consignas de cajón?
Qué cantidad de sangre la que escurre del puñal que el pincher Árias le clavó quién sabe cuántas veces en la espalda a su "glorioso" partido conservador.
Cuestionable la última bandera de campaña de Noemi de restituir el fuero total de los militares, incoherente, cuando al mismo tiempo condena públicamente los falsos positivos, como si en la justicia penal militar no pudieran quedar impunes estos crímenes, por más que sea una justicia especializada entre bomberos no se pisan las mangueras.
No da nada. Esto es politiquería apoyada por la tecnología. Cuánta plata le meten a estos actos inocuos. El parangón es un globo, sólo aire por dentro. Nada sustancial
Con todo el respeto para quienes trabajan en La Silla Vacía, creo que hay unas fotos que definitivamente sobran en la secuencia del final, sobre todo aquellas en las que el protagonista de la imagen aparece con la cabeza abajo leyendo (como una de Pastrana, una de Martha Lucía, etc.).
Dan más fuerza aquellas como la de Leyva manoteando y gritando, que aquellas donde el personaje se ve leyendo un papel y ni siquiera se logró la captura de la imagen cuando éste levantó la mirada al público.
Falta un criterio fotográfico aún más exigente al momento de elegir qué se sube y qué no se sube a la página.
Un saludo,
No todos los personajes son iguales, ni se paran frente al público igual. Pusimos muchas fotos porque fue un evento largo que duró de 2:30 a 8:30 y frente al micrófono pasaron muchas personas a hablar, cada uno con su papel, sus manos, su cara y su estilo. La foto de Marta Lucía, por ej., es sobre ella y sobre Noemí, por eso un plano abierto con el mensaje de atrás: UNIDOS CON NOEMI. En general, en esta galería pusimos muchas más fotos de las necesarias por simple generosidad; por dar una vista general sobre cómo fue el evento, quiénes asistieron, cómo era el ambiente, etc. Lástima que no las hayas disfrutado.
Disfruté las fotos, pero en mi corto periodo como Reportero Gráfico de agencia de noticias aprendí que cantidad no significa calidad: Es mejor subir dos fotos muy buenas y con fuerza, que 20 imágenes repetidas que no transmiten un mensaje y por el contrario, le restan fuerza a las que sí demuestran habilidad con la cámara.
Entiendo tú apreciación y creo que acá no hay imágenes repetidas. Hay un panorama del evento: lugar y personajes.
Es el monstruo bicéfalo, a veces azul, a veces rojo y a veces "unidos como debe ser" cerrando filas preocupados porque otras opciones políticas, diferentes, éticas, decentes les pueden arrebatar su poder. Es la secta política de una de las élites más corruptas y agresivas en el mundo corriendo para no ir a perder ni un votico, vendiéndose de lo que sea, aliándose con ladrones, mafiosos, asesinos con tal de no perder su sempiterno poder.
Por favor, corregir los errores de taquigrafía... son MUCHOS.
Gracias, Caos. Estaban sobre todo en los últimos párrafos. Tuvimos que correr. Ya están corregidos. Saludos