Incubadora de Santander, una de las empresas que más vende en la región, presentó a su presidente Juan Felipe Montoya como candidato al Consejo Directivo de la Corporación Autónoma Regional (CAR) de Bucaramanga, Cdmb. Sin embargo, su candidatura -para que ocupara uno de los puestos como representante del sector privado- se embolató. En la evaluación de los requisitos básicos ni siquiera lo tuvieron en cuenta.
Al final fueron elegidos Edwin Abril y Yesid Torres, dejando a Montoya y así a los cacaos del empresariado, de los grandes gremios, que lo apoyaban y buscaban poner consejero, excluidos pero atacando el proceso de elección y no tanto por lo de Montoya como por una supuesta irregularidad de fondo.
De acuerdo al Secretario General de la entidad, Montoya no se tuvo en cuenta porque en la solicitud de participación como candidato no anexaron los documentos que exige el proceso, incluyendo la hoja de vida y un acta de junta directiva que avale la aspiración.
La Silla conoció una carta del pasado 19 de noviembre donde el director jurídico de Incubadora le reclama al Comité Evaluador y le pide que se tenga en cuenta a su Presidente. Le respondieron que básicamente que Montoya nunca se había postulado, por lo que ya explicamos. Y después, dos fuentes cercanas a la iniciativa de que fuera consejero reconocieron que sí hubo errores de parte de la empresa en el proceso.
En cualquier caso, la elección se llevó a cabo y sin Montoya en la baraja los gremios más poderosos de la región, que reúnen a los cacaos del empresariado santandereano y se habían puesto de acuerdo para votar en bloque, perdieron la posibilidad de poner a alguien cercano en la poderosa CAR que será dirigida por el grupo del congresista Fredy Anaya durante los próximos años.
Además, Incubadora, uno de los gigantes de la agroindustria en el país, pierde el chance de quedarse con una silla en una Corporación que ejerce como autoridad ambiental en terrenos donde la empresa mantiene activos e intereses.
Fuera de la caída de Montoya, otro candidato cercano a los grandes gremios (Fenalco, Andi, Fenalco, Fenavi, Camacol etc.) que también se presentó, Luis Alfonso Gómez Gómez, quien ha sido miembro de la junta directiva de la Cámara de Comercio de Bucaramanga, presidente de la junta de Fenalco Santander y hermano del candidato a la gobernación Leonidas Gómez, no prosperó porque tampoco cumplía con todos los requisitos, a pesar de que a él sí lo evaluaron.
“Eran los candidatos serios y responsables…los más representativos del sector privado, de lo importante”, le dijo a La Silla una fuente de la Cámara.
El sector privado tiene dos representantes en el Consejo de la Cdmb y su elección la definieron empresas que se inscribieron para participar del proceso y escoger entre candidatos que las mismas empresas pueden postular.
En la audiencia que cerró la elección, donde fueron escogidos Abril y Torres, representantes de los gremios poderosos y las organizaciones cercanas al gran empresariado santandereano criticaron el proceso y se retiraron después de una polémica discusión. Los gremios alegan que sólo podían votar y postular candidatos empresas y organizaciones y no personas naturales como efectivamente se permitió.
El Secretario General de la Cdmb, Nisson Vahos, le aseguró a La Silla que podía participar toda persona (natural o juridica) que realice una actividad comercial y esté inscrita.
La Silla Santandereana revisó el Decreto 1850 de 2015 que reglamenta esta elección y se refiere a "organizaciones" y nunca a personas naturales. Dos fuentes de los gremios nos dijeron que eso es lo que ellos están reclamando. Vahos, sin embargo, argumenta que las personas también pueden estar "organizadas".
El pleito está servido.
Mientras tanto quedaron Abril, un ex personero del pequeño pueblo de Enciso, nominado por una señora que ha representado legalmente a una distribuidora de motos, y Torres, nominado por una firma del sector transporte.
*Esta historia fue actualizada a las 11:00 pm del 25 de noviembre